CIO y CDO: pilares estratégicos en la era digital empresarial

El CIO y el CDO, como líderes en tecnología y datos, son piezas clave en la transformación digital. En un entorno de rápida evolución, su colaboración asegura que las empresas no solo adopten tecnologías innovadoras, sino que maximicen su valor estratégico.

---

La transformación tecnológica en la industria ha sido un factor determinante para el éxito empresarial en las últimas décadas. Con el avance acelerado de herramientas innovadoras, como la inteligencia artificial (IA), el big data y la automatización, las empresas están en constante presión para adaptarse y evolucionar.

En este escenario, los roles del Chief Information Officer (CIO) y del Chief Data Officer (CDO) se han vuelto fundamentales. Ambos directivos se encuentran en el centro de la adopción tecnológica, liderando la transformación digital de sus organizaciones y asegurando que la tecnología y los datos se utilicen estratégicamente para maximizar el valor y la eficiencia.

Inteligencia Artificial en la industria: un futuro impulsado por datos

La inteligencia artificial se ha convertido en una herramienta fundamental para la industria, y su adopción continúa creciendo de manera exponencial. Según un informe de Minsait, el 67% de las empresas industriales ya utilizan la IA para optimizar sus procesos de fabricación, lo que ha permitido aumentar la eficiencia y reducir costos.

La IA no solo se utiliza para mejorar los procesos productivos, sino también para gestionar la calidad, la seguridad de los empleados y la cadena de suministro.

Uno de los avances más significativos en el uso de la IA en la industria es el concepto de gemelo digital, una representación virtual de un proceso o producto que permite a las empresas simular y monitorear operaciones en tiempo real. Esta tecnología ha permitido a las empresas reducir los defectos en la fabricación, anticiparse a problemas operativos y mejorar la precisión en la producción.

Sin embargo, la adopción de la IA en la industria no está exenta de desafíos. Las empresas enfrentan barreras como la falta de infraestructura tecnológica adecuada, la inestabilidad regulatoria y la escasez de habilidades técnicas dentro de sus equipos. Estos obstáculos deben ser superados para garantizar una adopción exitosa de la IA y maximizar su potencial en la industria.

La estrategia del CIO: un puente hacia la transformación digital

El rol del CIO ha cambiado dramáticamente en los últimos años. Ya no se trata simplemente de supervisar la infraestructura tecnológica, sino de actuar como un puente entre las innovaciones tecnológicas y la estrategia empresarial. Su responsabilidad es doble: guiar a la organización en la adopción de nuevas tecnologías y asegurarse de que estas se integren de manera eficiente para alcanzar los objetivos corporativos.

Según Claudio Muruzábal, presidente de Cloud Success Services de SAP, una de las principales responsabilidades del CIO es influenciar de manera adecuada al CEO y otros miembros del consejo directivo en lo que respecta a las inversiones tecnológicas.

Este liderazgo estratégico permite que las empresas adopten tecnologías como la inteligencia artificial (IA) con una visión clara y alineada con sus metas comerciales. En un momento en que la IA y otras innovaciones están redefiniendo las industrias, el papel del CIO es crítico para garantizar que las organizaciones no solo se mantengan al día, sino que también lideren el camino en sus respectivos mercados.

Asimismo, el éxito del CIO no se mide solo por la adopción de tecnología, sino por la capacidad de la empresa para utilizar esa tecnología de manera efectiva. Esto significa que el CIO debe ser capaz de implementar herramientas tecnológicas con objetivos claros, asegurando que estas herramientas aporten valor tanto a los clientes como a los empleados.

Es aquí donde radica la verdadera complejidad de su rol: no es suficiente con invertir en tecnología, sino que hay que asegurarse de que esta tecnología se utilice de manera que impulse el crecimiento y la competitividad de la empresa.

¿Más tecnología o mejor uso de la tecnología?

En la carrera por mantenerse competitivos, muchas empresas caen en la trampa de invertir en la última tecnología simplemente para no quedarse atrás. Sin embargo, desde la perspectiva de líderes como Muruzábal, este enfoque puede ser peligroso. La tecnología por sí sola no garantiza el éxito. Por lo que es fundamental que las empresas se pregunten si la tecnología que están adoptando realmente mejora sus procesos y crea un producto o servicio de valor.

"Lo que importa no es cuántas tecnologías nuevas se adopten, sino cómo se utilizan", enfatiza Muruzábal. Esta declaración pone de relieve la importancia del CIO como un estratega que debe asegurarse de que la tecnología se use con un propósito claro y bien definido.

El CIO debe ser capaz de identificar las tecnologías que aportan el mayor valor y, al mismo tiempo, descartar aquellas que no cumplen con los objetivos estratégicos de la empresa. Este enfoque crítico es esencial para evitar que las empresas inviertan en proyectos tecnológicos que, aunque atractivos en la superficie, no contribuyen de manera significativa al éxito a largo plazo de la organización.

La evolución del rol del CIO en la era de la IA

Innovaciones como la inteligencia artificial generativa y los grandes modelos de lenguaje, como ChatGPT, han surgido como tendencias clave que están redefiniendo no solo el panorama tecnológico, sino también el papel del CIO dentro de las organizaciones.

El informe Agenda del CIO 2024 de Softtek destaca que los CIO deben adoptar un enfoque proactivo y creativo para integrar estas innovaciones tecnológicas en los modelos de negocio existentes. Esto implica identificar oportunidades para transformar los procesos internos, mejorar la eficiencia operativa y, en última instancia, generar nuevos modelos de negocio basados en la tecnología.

Así, la IA no es solo una herramienta más en el arsenal del CIO; es una tecnología disruptiva que tiene el potencial de cambiar por completo la forma en que las empresas operan.

Para aprovechar plenamente esta tecnología, los CIO deben diseñar estrategias que les permitan extraer valor de los datos no estructurados y utilizarlos para tomar decisiones más informadas y estratégicas. Esto requiere una mentalidad creativa y una disposición para experimentar con nuevos enfoques y tecnologías.

CIO vs. CDO: un trabajo en equipo con roles distintos

Con el auge de la inteligencia artificial y el aumento de la importancia de los datos, también ha surgido una diversificación de los roles tecnológicos en las empresas. Si bien el CIO sigue siendo el líder encargado de la infraestructura tecnológica, cada vez más empresas están incorporando el rol del Chief Data Officer (CDO), cuyo enfoque principal es la gestión y explotación estratégica de los datos.

El CDO es responsable de garantizar que la empresa aproveche al máximo sus datos, desarrollando políticas de gobernanza de datos y asegurando el cumplimiento regulatorio.

Esta especialización permite que el CIO se enfoque más en las tecnologías que sustentan la infraestructura, mientras que el CDO se encarga de maximizar el valor de los datos. Juntos, estos dos roles conforman un equipo esencial para el éxito de cualquier organización en la era digital.

Según Rafael Conde del Pozo, director de Desarrollo de Negocios, Estrategia e Innovación en Softtek EMEA, "el futuro nos está dibujando una figura del CIO mucho más especializada y encaminada hacia áreas como la inteligencia artificial".

En este sentido, algunas empresas han comenzado a cambiar el título de CIO por el de Chief Technology Officer (CTO) para reflejar su enfoque más profundo en la transformación tecnológica.

La tecnología ha transformado la manera en que las empresas operan y compiten en el mercado global. En este contexto, el rol del CIO y del CDO ha cobrado una importancia estratégica, ya que ambos directivos son responsables de guiar a las organizaciones hacia una adopción tecnológica eficaz y una gestión de datos optimizada.

Mirando hacia el futuro, estos roles seguirán desempeñando un papel crucial en la evolución tecnológica de las empresas, trabajando en conjunto para superar los desafíos de la transformación digital y asegurar que las organizaciones no solo adopten tecnología, sino que la utilicen para generar valor real y sostenible.