El manejo de materiales es parte fundamental de la cadena de suministro y debe propender por aumentar la eficiencia del flujo de material, reducir costos, mejorar las condiciones de seguridad de los operarios y facilitar el proceso de manufactura.
A finales del año pasado el Material Handling Institute y Deloitte llevaron a cabo la encuesta“Innovations that drive supply chains”, en Estados Unidos, cuyo objetivo era proporcionar una perspectiva sobre las tendencias de la cadena de suministro emergentes. La encuesta incluyó a más de 450 encuestados de empresas grandes y pequeñas en una amplia gama de sectores, entre ellos: bienes de consumo envasados al por menor y al por mayor, automoción, consultoría, transporte y almacenaje, equipo para manejo de materiales y cadena de suministro, y servicios relacionados.
La encuesta reveló dos grandes barreras para el desarrollo y la adopción de innovaciones en la cadena de suministro: La primera es la escasez de mano de obra calificada; las empresas necesitan profesionales que tengan toda la experiencia y el conocimiento, y que posean la capacidad de implementar procesos y métodos en la cadena de suministro. Aparentemente encontrar “talentos” está en crisis y es preocupante debido a que se proyecta que en el año 2018 la cadena de suministro espera 1,4 millones de nuevos puestos de trabajo. La segunda es el enfoque continuo en la reducción de costos; prioridad para los empresarios. Sin embargo, hay que tener cuidado ya que la inversión en innovaciones son la clave para el crecimiento a largo plazo, el rendimiento, la eficiencia y la competitividad.
Para los empresarios hay tres áreas de innovación emergente, que según el informe, no están dentro de sus prioridades: Están son: sostenibilidad; para los empresarios esta área es “moderadamente importante”, sin embargo, admiten que hay vacíos en la implementación de iniciativas de sostenibilidad. La segunda es las tecnologías (M2M) de máquina a máquina móvil. Empresas de todos los tamaños y formas están empezando a aplicar estas tecnologías a sus cadenas de suministro, pero en esta primera etapa, la gran mayoría (70%) reportan brechas de capacidad, sin embargo, el 73% de las empresas planea seguir invirtiendo en esta área, y casi la mitad espera aumentar sus inversiones en los próximos tres años. Por último la impresión 3D (manufactura aditiva), que está logrando gran atención pero que en realidad no es importante para los empresarios; el 70% no está seguro de su impacto a futuro.
Pensemos por un momento cómo en América Latina podemos innovar en el manejo de materiales y la cadena de suministro de las plantas de manufactura. Hay varios caminos que nos pueden conducir a lograr mayor competitividad en el mercado y ser más eficientes.